Sobrepasando los 2000m nos encontramos con la Guillimona, una pequeña sierra situada entre la Sagra y la Sierra de las Cabras, perteneciente a la provincia de Granada. Una ruta preciosa para iniciarse en la nieve y también para entrar en contacto con algunas adversidades climatológicas, pues esta sierra casi siempre pone su toque de adrenalina con fuertes ventiscas o nieblas impenetrables. En este día nos tocó viento, aunque con la fortuna de disfrutar de un sol espléndido y unas vistas que alcanzaban hasta la mismísima Sierra Nevada.
Durante el descenso por la cara norte, tuvimos bastante espesor de nieve, hundiéndonos hasta las rodillas y haciéndonos caer rodando cuales croquetas. Diversión no nos faltó.
Además, esta ruta tiene el aliciente de poder disfrutar de algunos ejemplares de pinos laricios centenarios. Todo un espectáculo.
Puedes ver un ejemplo de ruta aquí, en nuestro caso partimos desde el Pinar de Araceli y llegamos hasta La Vidriera. Si tienes ansia viva de nieve esta ruta es para tí 😀
Hasta la próxima entrada.